El té de rooibos, es una infusión muy famosa por sus múltiples beneficios, sin embargo, esta maravillosa planta también se utiliza en la formulación de cosmeticos por las propiedades y nutrientes que le aporta a la dermis y al cabello. Por esta razón, en este artículo te develaremos todos los beneficios del rooibos en la piel.
¿Qué es el rooibos?
El rooibos, también conocido por su nombre científico Aspalathus linearis, es una planta de origen surafricano. Pertenece a la familia de las fabaceae, es una planta puede llegar hasta los 30 metros de altura.
Las hojas del árbol rooibos se dejan oxidar al sol para pasar por un proceso denominado como fermentación. Este proceso oxidativo es el que le proporciona a la planta el característico sabor y el color rojo.
Las hojas de rooibos contienen poderosos antioxidantes, minerales como magnesio, zinc, manganeso, hierro, calcio y también es rico en vitamina C. Se utiliza mucho en infusiones para beber todas las propiedades y beneficios que aporta esta planta.
La infusión de rooibos es conocida como té rojo africano, pero no tiene ninguna relación con la familia de los tés. Actualmente existen abundantes estudios y documentación de su uso medicinal, encontrándose numerosos beneficios tanto a nivel dérmico como interno.
Productos cosméticos que pueden contener roiboos
- Champús.
- Acondicionadores.
- Cremas antiarrugas.
- Tónicos faciales.
- Sueros faciales.
- Contorno de ojos.
- Mascarillas faciales.
Beneficios del roiboos en la piel
El poder antioxidante del extracto de rooibos
Dado que el rooibos es muy rico en antioxidantes, se convierte en una opción excelente a la hora de cuidar el cutis de forma natural, siendo especialmente útil para prevenir el envejecimiento prematuro.
El efecto antioxidante del rooibos es más útil, cuando es aplicado externamente sobre la piel, puede ayudar a la hora de mejorar las arrugas, la flacidez, las manchas y también las bolsas y ojeras que se forman debajo de los ojos,
Además, el rooibos es rico en polifenoles, sustancias químicas orgánicas con una gran capacidad antioxidante. Estos compuestos fenólicos protegen al cuerpo de los radicales libres que pueden causar cáncer.
El rooibos actualmente es la única fuente conocida de aspalatina, una sustancia que la planta produce como mecanismo de protección y que cuenta con propiedades que han intrigado al mundo científico.
Muchos de los beneficios del rooibos tienen que ver con este peculiar elemento. Las aspalatina es un flavonoide con potentes efectos antioxidantes, las cuales son capaces de combatir los radicales libres y revertir los efectos del envejecimiento en la piel.
Todo esto gracias a los flavonoides como la quercetina que contiene una enzima denominada superóxido dismutasa y vitamina C, cada una de esas sustancias tiene acción antioxidante y la suma de todas ellas es la que confiere al rooibos sus propiedades beneficiosas para la piel.
El poder antiinflamatorio y antibacteriano del extracto de rooibos
Los polifenoles del rooibos tienen beneficios para tratar las afecciones cutáneas como el acné, los eczemas, dermatitis, etc. por su contenido en zinc y ácidos. Al mismo tiempo tiene propiedades seborreguladoras, lo que significa que reduce el exceso de sebo en la piel.
El rooibos ayuda a tratar enfermedades como la psoriasis, ya que ayuda a proteger contra parte del estrés oxidativo que ocurre con la psoriasis. Además, esta planta tiene una acción regeneradora que estimula la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico.
Los nutrientes provenientes del extracto de rooibos aclaran las manchas de la piel, mejoran la firmeza, luminosidad y suavidad de la piel. También ayuda a afinar los poros y reducir su tamaño.
¿Cómo utilizar el rooibos en la piel?
El uso y consumo predilecto del rooibos es por medio de una infusión, ya que ingerir una taza de este té a diario, le aporta a todo el organismo sus propiedades y nutrientes medicinales.
El uso ideal del rooibos en la piel, es a través de productos cosméticos que estén formulados con esta planta. Dichos productos concentran las propiedades del rooibos para tratar las necesidades especiales de la dermis.
Otra forma para disfrutar de los efectos del rooibos es aplicarlo directamente sobre la piel, lo ideal usar un algodón o gasa en una infusión de rooibos y aplicarla en la zona afectada, dejando actuar durante un tiempo prolongando. Esta infusión se puede aplicar a diario en la noche.
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